La retinopexia neumática es un procedimiento quirúrgico oftalmológico utilizado para tratar desgarros o agujeros en la retina, que son problemas oculares serios que pueden llevar al desprendimiento de retina si no se tratan. Este procedimiento se realiza para prevenir o detener el desprendimiento de retina y preservar la visión del paciente.

Procedimiento:

Durante la retinopexia neumática, se utiliza una combinación de gas y crioterapia (frío) para sellar y estabilizar el desgarro o agujero en la retina. El procedimiento generalmente se realiza en el consultorio del oftalmólogo y puede implicar los siguientes pasos:

1. Inyección de gas: Se inyecta una pequeña cantidad de gas (generalmente gas SF6 o C3F8) en la cavidad vítrea del ojo, que es el espacio lleno de gel entre la lente y la retina.

2. Posicionamiento: El paciente puede ser instruido para mantener una posición específica, como acostarse boca abajo o mirar hacia abajo, para ayudar a que el gas se mueva y se posicione correctamente sobre el área del desgarro o agujero en la retina.

3. Crioterapia: Se aplica frío a través de una sonda especial en el exterior del ojo para congelar el área alrededor del desgarro o agujero en la retina. Esto ayuda a crear adherencia entre la retina y la coroides subyacente, lo que previene el desprendimiento de retina.

4. Recuperación: Durante las semanas siguientes al procedimiento, el gas inyectado en el ojo se reabsorberá gradualmente por el cuerpo. Durante este tiempo, es importante evitar ciertas actividades, como viajar en avión o realizar actividades en altitudes elevadas, que puedan aumentar la presión dentro del ojo y afectar la posición del gas.